Nuestro cacao: originario y cimarrón
Los pueblos del jaguar, el guardián del cacao, el corazón de la montaña, el trueno y la semilla de las aguas y los tiempos.
Entre los pueblos mesoamericanos, en particular en Oaxaca, en las montañas, existe el pensamiento y el significado de que el jaguar es el guardián del cacao; el rugido del jaguar se asemeja al sonido del corazón del monte y al trueno, al corazón del monte, aquel que cada tanto habla, en un crujir o en pulso, en movimiento del agua y la tierra, el que en terremoto habla cuando la tierra quiere decir algo, el que en la montaña se escucha y se siente aunque no se vea, el guardián, el corazón del pueblo. El rayo es la conexión con el cielo y con la tierra.